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Pedagoga

Maltrato infantil

09-04-2010

Faerman Erica


Este escrito nace a partir de nuestro trabajo, acercamiento al campo, investigacin, anlisis y otros derivados de las denuncias que ha sido posible incluir en la justicia.

Recibimos informacin que evidencia el maltrato al que son sometidos nios violentados por los adultos cuyo deber es cuidarlos y preservar sus derechos. Numerosas situaciones contrastantes con la proteccin integral que los nios ameritan.

La sistematizacin y la cronicidad de estos comportamientos son las que han generado la categora de violencia emocional y fsica que podran ser capaces de ocasionar severas perturbaciones a estos nios que no logran defenderse del clima de permanente humillacin al que son sometidos.

Las violencias los vulneran, los daan y los aterrorizan. Vulnerabilidad que se expresa por la imposibilidad de defensa frente a los hechos traumatizantes y que podemos inferir adems como efecto de vivir en la pobreza.

Miradas de las docentes que diagnostican el tono azulado en el cuerpo de sus alumnos corroboran la persistencia de estos hechos.

Sabemos que frecuentemente la escuela juega un papel contenedor y protector. Tales formas de contencin que demostraron propiciar un espacio necesario para que los silencios contenidos, pudieran ser expresados reclaman una revisinfrente a la decisin arbitraria de cambiarlos de escuela. Tal decisin emerge de quienes se sienten descubiertos y saben que estn abusando de su poder contra quienes no pueden defenderse.

Se intenta lesionar una modalidad educativa que propicia el reconocimiento de s mismos como sujetos que pueden reclamar y pedir por sus derechos. Se debe impedir que se proceda de manera incorrecta con las vctimas.

Como consecuencia de dicha arbitrariedad los chicos podran quedar inmersos en serias contradicciones cuando se los expropia del lugar donde pudieron denunciar lo que padecen diariamente. Cuando en realidad se deberan poner en conocimiento y hacer respetar sus derechos.

La falta de escolaridad a las que generalmente se los somete los pone en una situacin mayor de indefensin y riesgo.

El punto de inflexin se produce porque sabemos respecto de nuestra responsabilidad de defender sus derechos.

De lo dicho se desprende la necesidad imperante en la aplicacin de las leyes frente al inminente riesgo de revictimizacin frente al hecho inmoral que cada vez con mayor frecuencia se intenta ejercer.

Erica Faerman

Profesora y Licenciada en Psicopedagoga con orientacin Clnica, graduada en la Universidad Blas Pascal de Crdoba (2001).
Ttulos de posgrados de Estimuladora Temprana, Psicodramatista, Psicopedagoga Clnica y Orientadora Ocupacional/Vocacional.
Ha publicado artculos en diferentes revistas de la ciudad de Rosario y Funes en calidad de Profesional invitado (2006/07)
Ha participado en calidad de Profesional invitado de la inauguracin del Centro Psicopedaggico Punto de Apoyo de Crdoba.
Posee experiencia como Psicopedagoga en diferentes Instituciones de Salud y educacin, Privadas y Pblicas.
Actualmente Directora del Centro Integral de Asistencia Psicopedaggica, Psicolgica y Fonoaudiolgica Trekan de la Ciudad de Rosario.

Pods enviarle a la autora tus consultas referidas a este artculo escribiendo a
[email protected], indicando en el asunto ttulo del artculo y nombre de la autora.

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